¿Qué sucede cuando la creatividad y la tecnología se unen?
En la actualidad, uno de los debates más interesantes en el mundo del arte gira en torno al uso de la inteligencia artificial para crear dibujos y “obras de arte”. Algunos, por ejemplo, el mediático Antonio García Villarán defienden el uso de la IA como una herramienta que puede ayudar a los artistas a ser más eficientes y creativos, mientras que otros argumentan que la creatividad no puede ser replicada por una máquina como, por ejemplo, Isaac Sánchez (Loulogio).
Quiero explorar con vosotros este debate y cómo el uso de la inteligencia artificial podría cambiar el mundo del arte.
Por un lado, tenemos a artistas que están a favor del uso de la IA, que argumentan como esta tecnología puede ser utilizada como una herramienta creativa para los artistas. Por ejemplo, una red neuronal puede ser entrenada para generar imágenes basadas en ciertas pautas o estilos e incluso entrenada, lo que permite a los artistas explorar nuevas ideas y formas de expresión. Además, la IA puede ser utilizada para hacer tareas tediosas como la creación de bocetos o la digitalización de dibujos.
Por otro lado, aquellos en contra argumentan que el uso de la IA para crear obras de arte reduce el valor de lo que entendemos como arte. Considero la creatividad humana como única y no puede ser replicada por una máquina. Además, el uso de la IA para crear obras de arte podría disminuir la importancia de la experiencia del artista en la creación de una obra de arte, lo que podría llevar a la creación de obras de arte genéricas e insípidas. Cabe la posibilidad de ser una moda de los tiempos del consumo rápido, donde todo lo queremos “para ya”.
Sin embargo, opino que es importante destacar que el uso de la IA en el arte no tiene por qué ser una amenaza para la creatividad humana, le podemos dar al botón de “apagado” cuando queramos. De hecho, puede ser una oportunidad para los artistas de explorar nuevas formas de expresión y expandir sus destrezas. La IA puede ser utilizada como una herramienta para ayudar a los artistas a explorar nuevas ideas y perspectivas, como han sido otras herramientas, por ejemplo, Photoshop, y para liberarlos de las tareas tediosas que consumen su tiempo y energía creativa.
En última instancia, el uso de la IA en el mundo del arte está en constante evolución, y todavía queda por ver cómo cambiará el mundo del arte en los próximos años. Lo que está claro es que la IA puede ser una herramienta valiosa para los artistas, siempre y cuando se utilice de manera ética y responsable. La creatividad humana siempre será única y no puede ser replicada por una máquina(todavía), pero la IA puede ayudar a los artistas a expandir sus habilidades y crear obras de arte más interesantes y significativas.